martes, 10 de febrero de 2009

alberto fuguet - entrevista (tomado de el comercio.com.pe)


ENCUENTROS. Invitado en la Primera Semana Audiovisual


El 'sudor' creativo de Alberto Fuguet


EL ESCRITOR Y CINEASTA CHILENO ESTÁ EN LA SELVA EN BUSCA DE ESCENARIOS Y PERSONAJES PARA RODAR SU SEGUNDO LARGOMETRAJE EN NOVIEMBRE
Por: Gonzalo Galarza Cerf Enviado Especial

-------------------------------------------------------------------------------------------------


IQUITOS. Alberto Fuguet ha empezado a transpirar. El escritor y cineasta chileno recorre Iquitos en busca de locaciones para su nuevo proyecto cinematográfico: “Sudor”. Una historia que partió de la confusión durante un intercambio de correos electrónicos con el periodista Francisco Bardales. “Me gustaría ir con una cámara”, le escribió Fuguet a Bardales, quien creyó que iría a filmar una película a Iquitos, su ciudad. “Y por qué no”, pensó finalmente Fuguet.


El director de “Se Arrienda” lleva puesto un polo en el que se lee “Filmmaker” y una gorra que dice “Writer”: “Para mí no es esquizofrenia filmar y escribir. Pero si me obligan a elegir, voy a optar por el cine”. Esta mañana está empapándose de la ciudad para escribir el guion, visualizando dónde estará Alejo (Pablo Cerda), el personaje de la película que será coproducida por Cinépata (Chile) y Audiovisual Films (Perú), y que contará con la actuación de Vanessa Saba.
La historia empieza con un yuppie que acaba de ayudante de cocina en un crucero de Iquitos tras la crisis financiera. ¿Has empezado a conocer ese mundo de clase alta?

En Estados Unidos he podido conocer a niños ricos de países pobres. A mí me da un poco de pena y curiosidad esa gente rica, que vive aislada y temerosa de que la secuestren. Es como una mafia, se protegen entre ellos; son personajes que han estudiado en el extranjero y se encuentran en “business class”. Una vez me vine allí con (Pedro Pablo) Kuczynski y me llamó la atención que fuera el primer ministro.


¿Por qué?

Era supersimpático conmigo, pero vivía en el mundo de los veinte elegidos. “Sudor” no va a ser exactamente como eso. Mi personaje ha tenido la suerte o no de aprovecharse de ese mundo. Ha sido como un tipo simpático, si bien no era rico, la gente lo acogió porque la hacía reír. Es un personaje que tenía algo y tendrá que aprender a no tener nada y gozar con eso.


¿Aprende a desprenderse?

Es la historia de un despojo, eso me interesa. Es un poco lo que aprendí en “Dos horas” (cortometraje): que uno puede despojarse y filmar pobre. Incluso en el tema literario, ya no estoy en la carrera literaria. Y me ayudó mucho creativamente. No me importa tener más éxitos ni ser “best seller”. Ahora hago libros raros como el de Andrés Caicedo y el de Héctor Soto.


¿Pero valen más en lo personal?

No es que me vaya a ganar el premio nacional, pero me lo estoy pasando bien y puedo hacer películas sin tener todo lo que uno necesite. Creo que hay mucha gente que necesita mucho para ser feliz. Yo cada vez necesito menos.


¿Es como tu personaje?

La selva da esa idea de despojo, interna y externamente, sin ropa…Sí, y creo que va a sufrir un poco. Quiero que alguien que ha vivido preocupado de los trajes, del gel y de las cremas se vaya dando cuenta de que al final da lo mismo si se afeita o no.


¿Qué cosas de Iquitos vas guardando en tu disco duro?

Me parece que es mucho menos ardiente, sexual y degenerado de lo que la gente cree. Es como una ciudad de provincia con más transpiración, pero no es Sodoma y Gomorra. Tiene características visuales que no hay en otros lados. Estoy fascinado con que todo el mundo tenga moto, una cosa de rebelde, con una carga de libertad. También con la gente que ha venido aquí a radicarse, con el barco El Delfín, quiero que mi personaje trabaje allí.


En cuanto a fotografía, ¿la selva dará mucho?Eso puede ser también un problema porque cuando algo es muy bonito uno se puede engolosinar.

No puede ser “Madagascar 2”. Tampoco es tan colorido como lo venden ni estridente. Los colores están como desteñidos, eso me gusta, van teniendo como capas e historias, es como si todo hubiese sudado.

No hay comentarios: